Atrás, atrás.
Desandando los trazos sobre el camino.
Las manos de la mente destejen,
revisan, investigan.
Cada hilo,
cada nudo,
la trama se abre dócil,
intacta telaraña
sobre el azul del sentimiento.
Recodos,
los hilos de seda
tornándose amarillos.
Inválidas sonrisas,
sangre en la trama
oscurecida por el tiempo.
La nche llega.
El alba nos encuentra dormidos
sobre el mismo tejido
prieto y fijo,
plegado en las estanterías
del incosciente.
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M.M.Vendramini - "Eclipse de cenizas" - Alción 1994.-
Costó convencernos, desde lo inhóspito no es necesario volver.
3 comentarios:
Interesantes versos, imagino de tu libro. Me encantaría tenerlo para leerlo completo.
Una encrucijada en el poema.
Muchos besos Merce.
Qué decirte? Qué decirte???
Si son tus versos los escalones de mi alma… adoro leerte, me emociona leerte.
Muchas veces volar se asocia a “lo irreal o fantasioso” pero en tus palabras que abrazan los versos y construyen tremendas esculturas de sabiduría, volar significa aprender-asimilar-razonar-comprobar-etc.
Te quiero mucho!!!
Querida Merce,
Vengo de nuevo a preguntarte: ¿Por qué no escribes? O mejor dicho: ¿Por qué no publicas? Hace falta leerte. Tus poemas enseñan.
Muchos besos Merce.
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