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arrib.

martes, 9 de marzo de 2010

Poemas de Fernando Pessoa ( Alberto Caeiro).-

Desde la ventana más alta de mi casa
digo adiós, con un pañuelo blanco,
a mis versos que parten hacia la humanidad.


Y no estoy alegre ni triste.
Éste es el destino de mis versos.
Los escribí y debo mostrarlos a todos
porque no puedo hacer lo contrario,
como la flor no puede ocultar su color,
ni el río ocultar que corre,
ni el árbol ocultar que da fruto.


Allá van ellos, lejos ya, como la diligencia, y yo sin quererlo siento pena
como un dolor en el cuerpo.


¿Quién sabe quién los leerá?
¿Quién sabe a qué manos irán?


Como a una flor, el destino me arrancó para los ojos.
Como a un árbol, me arrancaron los frutos por las bocas.
Como un río, el destino de mis aguas era ir más allá de mí.
Me someto y me siento casi alegre,
casi alegre como quien se cansa de estar triste.


¡Váyanse versos, váyanse!
Pasa el árbol y la Naturaleza lo dispersa.
Se marchita la flor y su polvo dura siempre.
Corre el río y entra al mar y su agua sigue siendo siempre la
                                                                       que fue suya.


Paso y quedo, como el Universo.


___________


A veces, en días de luz perfecta y exacta,
en que la cosas tienen toda la realidad que pueden tener,
me pregunto a mí mismo sin apuro
por qué sigo atribuyendo
belleza a las cosas.


Una flor, ¿tiene acaso belleza?
¿Acaso tiene belleza un fruto?
No: tienen color y forma
y existencia, nada más.
Belleza es el nombre de algo que no existe.
Que yo doy a las cosas a cambio del agrado que me producen.
No significa nada.
¿Entonces por qué digo de las cosas que son bellas?
Sí, incluso hasta mí,que vivo sólo porque vivo,
llegan invisibles las mentiras de los hombres
ante las cosas,
ante las cosas que simplemente existen.


¡Qué difícil es ser uno mismo y no ver sino lo visible!


___________


Si ustedes quieren que yo tenga un misticismo, está bien, 
                                                                         lo tengo.
Soy místico, pero sólo el cuerpo.
Mi alma es simple y no piensa.




Mi misticismo consiste en no querer saber.
En vivir y no pensar en eso.


No sé qué es la Naturaleza: la canto.
Vivo en la cima de un monte.
En su casa encalada y sola,
y ésa es mi definición.
__________

Fernando Pessoa
Ficciones del interludio, Emecé, Buenos Aires. 2004.
Traducción de Santiago Kovadloff.-
Ficciones de interludio es una antología poética personal, preparada
por el propio Fernando Pessoa. Reúne lo que él concibió como lo
mejor de los tres heterónimos (Álvaro de Campos, Ricardo Reis y Alberto Caeiro) y del propio Pessoa.-

2 comentarios:

Unknown dijo...

son muuy lindos!

Mercedes Vendramini dijo...

Qué bueno que te gustaran!
Besos!